Al menos siete personas fallecieron y treinta resultaron heridas este viernes tras una potente explosión en una comisaría de policía en la región de Cachemira, administrada por la India. El estallido se produjo en el distrito de Baramulla, causando graves daños estructurales en el edificio y vehículos aledaños.
Las autoridades indias han iniciado una investigación para determinar si el incidente fue un ataque deliberado o un accidente relacionado con el almacenamiento de material explosivo. Hasta el momento, ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad, aunque la zona ha sido escenario histórico de tensiones entre fuerzas de seguridad y militantes.
Los heridos, entre los que se encuentran agentes y civiles, fueron trasladados a hospitales cercanos, varios de ellos en estado grave. El gobierno regional anunció medidas de seguridad reforzadas en la zona mientras continúan las labores de rescate y la identificación de las víctimas.
Fuente: Jorge Yañez












