Un estudio económico reciente revela que aproximadamente el 50% de los hogares argentinos debe recurrir a sus ahorros, vender pertenencias o solicitar préstamos para poder cubrir sus gastos mensuales básicos. El dato refleja la crítica situación que atraviesan las familias ante la persistente presión inflacionaria y la pérdida del poder adquisitivo.
El informe, elaborado por una consultora especializada, detalla que estas estrategias de supervivencia financiera se han normalizado en amplios sectores de la población, incluso en hogares de clase media que tradicionalmente mantenían cierta estabilidad económica. La incapacidad para llegar a fin de mes con los ingresos regulares afecta a diversos estratos sociales.
Expertos en economía social alertan que esta situación representa un preocupante indicador de vulnerabilidad económica y afecta la capacidad de planificación financiera a mediano y largo plazo de las familias. El fenómeno se ha intensificado en los últimos meses, según muestran las series estadísticas comparativas.
Fuente: Jorge Yañez












